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El FC Barcelona se enfrentó a un duro desafío en su reciente encuentro contra el Celta de Vigo, donde el resultado final fue un empate 2-2. Este partido, que marcó el primer empate del equipo en un encuentro oficial desde el 3 de marzo, rompió una impresionante racha de 31 partidos consecutivos sin empates. La decepción fue palpable, y el técnico Hansi Flick no dudó en expresar su frustración.
Reflexiones de Hansi Flick
Hansi Flick, conocido por su enfoque autocrítico, reflexionó sobre la actuación del Barcelona. Desde el banquillo, el técnico alemán mostró su descontento, especialmente tras encajar dos goles en los últimos minutos del partido. «No fueron sólo los últimos 10 minutos. Fue todo el partido. Hicimos un partido realmente malo. Tenemos que ser honestos», afirmó con determinación.
Flick no se detuvo ahí. Criticó la actuación general del equipo, señalando que los problemas no solo se presentaron en los momentos finales, sino que fueron evidentes a lo largo de todo el encuentro. «Cometimos muchos errores, incluso en la primera parte, y no teníamos confianza con el balón. No jugamos el fútbol al que estamos acostumbrados», agregó.
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A pesar de que el equipo logró salvar un punto, Flick dejó claro que actuaciones como esta son inaceptables y no deben repetirse. «Tuvimos suerte en algunas situaciones y al final conseguimos un punto, pero tenemos que reaccionar porque no se puede repetir», enfatizó. La necesidad de un cambio en la mentalidad y el enfoque del equipo es urgente si quieren mantener sus aspiraciones en la liga.
El entrenador también destacó que cada partido requiere un compromiso total y concentración. Enfrentarse a un equipo como el Celta, conocido por su mentalidad fuerte, siempre representa un reto. «Siempre es difícil jugar contra el Celta, que tiene buena mentalidad. Hacía viento, pero eso no es excusa. A veces un centímetro puede decidir, pero hubo un poco menos de concentración», comentó.
Errores y lecciones aprendidas
Flick reconoció factores externos como el viento, pero se negó a utilizarlos como excusa. En su opinión, las lagunas en la concentración y el esfuerzo fueron más determinantes. «Lo que vimos hoy es el resumen: cuando juegas al 80% o al 85% no puedes ganar. Esto es lo que puedo decir», subrayó.
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La reacción de Hansi Flick en el vestuario tras el empate del Barcelona ante el Celta de VigoEl técnico también abordó las actuaciones individuales de sus jugadores. Hablando sobre Gavi, mostró optimismo respecto a su crecimiento y espera que pronto pueda jugar 90 minutos completos. «Lo vi hacerlo bien, pero paso a paso. Ojalá pueda jugar los 90 minutos pronto porque nos aporta mucho», señaló.
En cuanto a la expulsión de Marc Casado, Flick reiteró que la concentración es clave, especialmente en campos desafiantes como Balaídos, donde la complacencia puede resultar costosa. «Fue una consecuencia de todo el partido. Muchos errores. Pasos equivocados, decisiones equivocadas. Perdimos dos puntos juntos y todos nos recuperaremos», afirmó.
Decisiones tácticas y el futuro del equipo
Cuando se le preguntó sobre la sustitución de Gerard Martin tras el descanso, Flick dejó claro que sus decisiones siempre se basan en el rendimiento y no en las tarjetas amarillas. «No hago cambios en función de la tarjeta amarilla o no, sino en función del rendimiento», explicó.
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El polémico momento que salvó al defensa del Celta de Vigo de la tarjeta roja ante el BarcelonaEl mensaje que dejó a su equipo fue contundente: para ganar hay que jugar al 100%, y nada menos es aceptable. «Ya he dicho que el resultado es consecuencia de cómo jugamos. Si no juegas al 100% no puedes ganar. Es así de simple», concluyó.
Con este empate, el Barcelona se enfrenta a la necesidad de reflexionar y ajustar su enfoque. La temporada es larga y cada punto cuenta, pero el equipo debe aprender de sus errores y volver a la senda del triunfo. La afición espera ver un cambio en el próximo partido, con un equipo que muestre la garra y la determinación que siempre ha caracterizado al FC Barcelona. La pasión por el fútbol y la historia del club exigen más, y es momento de que el equipo lo demuestre en el campo.
